La Vida de Alec Vulturi

Joven de belleza extraña y apacible, su mirada analiza a todo aquel que es un enemigo en potencia, su don es el peor de todos: paraliza los cinco sentidos de todo aquel que rompa las reglas hasta dejarlo completamente aislado e inútil.

Alec Vulturi es el hermano gemelo de Jane, un joven que aparenta tener 15 años, pero que en realidad fue convertido a la edad de 13, su personalidad es fría y calculadora, respeta las normas por encima de todo, es un fiel servidor de Aro y aunque tenga poderes superiores a los de su hermana Jane, el mismo Alec le tiene miedo por su fuerte personalidad.

Un vampiro malvado pero más piadoso que su hermana, tiene el cabello marrón oscuro y una risa sarcástica que inspira escalofríos y miedo, pues su pasado le enseñó que debe desconfiar de la gente, ya que desde niño fue considerado “Demasiado peligroso y raro”.

Al igual que Jane fue relegado de las personas más cercanas a él, pues Santo Estevo (su pueblo natal) era uno de los centros más importantes de la inquisición, donde la gente era muy supersticiosa y lo encontraron culpable de brujería.

Todo comenzó con su hermana, a la que su madre le tenía un miedo atroz, Jane fue alejada de todos los miembros de la familia, incluido él, que inmediatamente intuyó el peligro que corría, por lo que decidió ocultar su don de dominio a extraños.

Los contantes gritos y peleas entre su padre y madre sobre el futuro de su hermana, fueron el detonante para que Alec plasmara su enojo y así sus “cualidades”, que cuando eran humanos no tenían el mismo efecto que ahora en su conversión.

Pasados los meses ambos fueron presa de martirios irracionales: exorcismos, encierros sin comida, confesiones absurdas y miles de remedios caseros en contra de su salud y voluntad, Alec no aguantaba más, y fue enjuiciado y condenado a la hoguera junto a su hermana en aras de la edad media, el peor episodio de toda Europa.

Alec fue el primero que tuvo contacto con Aro, quién minuciosamente lo observaba desde lo lejos mediante el enjuiciamiento, el niño al principio creyó que era un sacerdote más…pero al momento justo en el que el verdugo iba a prender la hoguera, los Vulturi comenzaron su masacre por todo el pueblo, acto seguido Aro lo carga en su caballo y Cayo se lleva a su hermana.

Alec despierta y se encuentra en una casa de extremo lujo y opulencia, y esos tres hombres lejos de portarse hostiles e inquisitivos los cuestionan sobre sus habilidades, ambos niños se dan cuenta de que tienen algo fuera de lo común, pero inmediatamente ven a Aro como su padre y maestro, un ser que los ama por salvarlos de la hoguera.

Los años siguientes fueron pasando tranquilos, nunca cuestionaron los constantes viajes de sus tíos, hasta que poco a poco fueron instruidos en el mundo vampírico, y cumplidos los 13 años Alec y su hermana son convertidos por Aro, por lo que pasaron mucho tiempo recluidos antes de poder viajar y contenerse de atacar a la gente en público, pues el joven siempre probó sangre humana.

Alec recibió clases de música, cultura general e idiomas y fue entrenado para la guerra, respeta y admira a su hermana, pero adora por sobre todas las cosas a los Vulturi, los causantes de su vida eterna.